Los fuertes aguaceros ocasionados por el frente frío 19, provocaron el desbordamiento de cinco ríos en la región, así como el encharcamiento en colonias urbanas asentadas en zonas bajas y en puntos con un deficiente sistema de drenaje y bombeo de aguas pluviales.
Las estaciones hidrométricas del Organismo de Cuenca Frontera Sur de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) reportó que los ríos San Pedro, Tulijá, Pichucalco, Platanar y Grijalva, esta mañana se ubicaron por arriba de sus Niveles de Aguas Máximas Ordinarias (Namo), y afectaban en diferentes medidas zonas ribereñas rurales.
La creciente de estos ríos era principalmente por las intensas lluvias registradas en la víspera, que al escurrir elevaron y desbordaron sus cauces.
El caudal con mayor elevación, fuera de su cauce con 1.13 metros, era el río Tulijá, proveniente de la sierra noreste de Chiapas, y que irriga la planicie del municipio de Macuspana.
El río Pichucalco, en el municipio de Teapa, por segundo día consecutivo se mantuvo desbordado, 74 centímetros arriba de su Namo, aunque este martes en menor escala que en la víspera que estuvo 1.38 metros fuera de su cauce.
El río San Pedro, proveniente del norte del Péten, Guatemala, y que atraviesa zonas rurales del municipio fronterizo de Balancán, se mantenía 31 centímetros por arriba de escala crítica.
En tanto que el Sistema Hidroeléctrico Grijalva, conformada por las presas Angostura, Chicoasen, Malpaso y Peñitas, mantenía embalses elevados, incluso el primero de ellos se encontraba al 100 por ciento de llenado de su Namo. Los otros tres al 99 por ciento, 96 por ciento y 97 por ciento, respectivamente.
El río Samaria, que recibe los escurrimientos de la última presa del Sistema Hidroeléctrico Grijalva, así como del río Platanar, subió 50 centímetros en las últimas 24 horas, y su Namo se ubicaba 64 centímetros por debajo de su escala crítica, aunque mantenía inundadas las zonas bajas rurales de Cunduacán y en el área conocida como la "Olla de la Chontalpa", en Nacajuca.