GUERRA DE OFENSIVAS
Las Águilas perdieron el rumbo al principio de la campaña y muchos ya preparaban las burlas para Chip Kelly y quienes apoyaban la idea que llegaría a revolucionar las ofensivas de la NFL.
Si bien Kelly, ex coach de los Patos de Oregon en el fútbol colegial, terminó por adaptarse a las reglas no escritas de la liga y utilizar un ataque mucho más conservador, no por eso no dejó de ser espectacular.
La revelación de Nick Foles como quarterback, relegando a Michael Vick a la banca y el despunte de LeSean McCoy como corredor de élite en la liga, terminaron por colocar a Filadelfia como la segunda mejor de la liga, solo por detrás de los Broncos de Denver.
Fue esa ofensiva la que apuntaló el resurgimiento de unas Águilas que parecían destinadas a quedar relegadas de la postemporada de nueva cuenta. Esas grandes actuaciones a la ofensiva hicieron olvidar que su defensiva, armada al vapor en la pretemporada, no estaba al mismo nivel, prueba de ello es el lugar 29 de 32 equipos que ocupan en ese ramo, principalmente contra el pase donde aceptaron más de 4 mil 600 yardas en la temporada.
El miedo de los fans de Filadelfia se incrementa al saber que frente tienen a uno de los 5 mejores quarterbacks de la liga, Drew Brees.
El líder de la ofensiva de los Santos de Nueva Orleáns regresó a la normalidad a su equipo, quienes pasaron por una severa crisis el pasado año al tener suspendido a su coach y multados a algunos jugadores, y volvió a meterlos a los playoffs.
El poderío de su ofensiva aérea, respaldada por el mejor ala cerrado de la liga Jimmy Graham, ya no es ninguna novedad, pero este año por fin encontró apoyo en su ataque terrestre, que si bien no fue brillante, si quitó mucha presión al mariscal de campo.
Aunque el frío que contrasta con la comodidad del juego bajo domo al que está acostumbrado el circo aéreo de Brees y compañía, parece equilibrar la balanza y poner a este como el principal atractivo de la jornada sabatina en la ronda de juegos divisionales.
DUELO MUY PAREJO
Los Jefes de Kansas City fueron una de las historias más sorprendentes de esta campaña… hasta que se toparon a Peyton Manning y los Broncos de Denver.
El equipo que se renovó en casi todas sus líneas inició la temporada 2013 arrasando a los rivales durante los primeros nueve juegos con una defensa que avasallaba a las ofensivas y un excelente ataque terrestre, en donde mucho tenía que ver el juego sin errores del mariscal de campo Alex Smith.
Mostrando una cara muy distinta a la de los últimos años, encabezados por el renovado headcoach Andy Reid y comandados por el corredor Jamal Charles, que tuvo su mejor temporada en años, los Jefes eran los únicos invictos aunque muchos cuestionaban la facilidad de su calendario hasta ese momento. Fueron en gran parte las lesiones en su poderosa defensa las que volvieron irregular a Kansas en la parte final del calendario.
La derrota en la jornada 10 frente a los Broncos, significó el inicio de tres derrotas consecutivas que puso en duda la verdadera capacidad de los líderes de esa división, dudas que no terminaron de disiparse en sus últimos cuatro juegos al ganar dos contar rivales con récord perdedor —Raiders de Oakland y Pieles Rojas de Washington— y perder dos contra equipos ganadores como los Cargadores de San Diego y los mismos Potros de Indianápolis.
Enfrente tienen a un equipo que por años ha tenido la magia para elegir a quarterbacks de primer nivel desde el draft colegial. Andrew Luck, en su segundo año, repite la calificación esta vez como líderes de su división a pesar de la lesión de su principal, y casi único receptor, Reggie Wayne.
Aunque la fortaleza de de los Potros sigue siendo su ofensiva, al tener a la defensa número 20 de la liga, la falta de receptores de calidad y una decepcionante temporada de Trent Richardson corriendo el balón, han mostrado debilidades fuertes durante varios juegos de la temporada, sin mencionar el hospital en que está convertido el equipo en varias líneas.
Indianápolis mostró que puede ganarle a equipos contendientes durante toda la temporada —Seattle, San Francisco, Denver y Kansas City, están entre sus víctimas— para luego ser apaleado por equipos sin mucho cartel como lo son Carneros de San Luis y Cardenales de Arizona.
La inconsistencia de ambos equipos hace este uno de los duelos más parejos de la ronda Divisional, en la que la balanza debe cargarse hacia el equipo de casa por dos razones, la victoria y manera en que dominaron a los Jefes en duelo previo y la mano de Andrew Luck, que en casa tiene sus mejores actuaciones.
LA HISTORIA
- Kansas City ha enfrentado a Indianápolis en tres ocasiones anteriores en los playoffs (1996, 2004 y 2007) con los Potros siendo el que mejores números tienen: una victoria 10-7 en el Arrowhead Stadium en los playoffs de 1995 de la AFC (07 de enero 1996), una victoria por 38-31 en Arrowhead en los playoff de la AFC del 2003 (11 enero de 2004), y una victoria 23-8 en el RCA Dome en el juego de comodín de la AFC del 2006 (06 de enero 2007).
- Desde la fusión AFL-NFL, Kansas City e Indianápolis se han enfrentado 23 veces en general, con los Potros con una ventaja de 15-8.
LOS DATOS CLAVE
- Los Jefes son uno de los equipos con más talento en la NFL como lo demuestra el hecho de que ocho miembros de la nómina de Kansas City fueron nombrados para el Pro Bowl 2014, empatando San Francisco por la mayor cantidad de jugadores de una sola lista en la NFL.
- El as bajo la manga de Indianapolis es la defensiva, liderada por Robert Mathis, quien ganó el Premio Deacon Jones por sus 19.5 capturas y que se perfila para ganar como el defensivo del año, más por que su poderío se ha intensificado recientemente, forzando ocho pérdidas de balón en la actual racha ganadora.