Una vacuna contra el virus del ébola podría estar lista en 2015, si se cumplen los plazos más optimistas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de los laboratorios farmacéuticos, declaró ayer el director de vacunas de esa agencia, Jean-Marie Okwo Bélé.
“Se pueden aplicar procesos de urgencia para que a lo largo del año 2015 se disponga de una vacuna que se pueda utilizar”, dijo Okwo Bélé en una entrevista con la emisora Radio Francia Internacional.
La farmacéutica británica GlasxoSmithKlein (GSK) es el laboratorio que tiene más avanzado el desarrollo de la vacuna, que ha probado en animales “con resultados excelentes”, agregó Okwo Bélé.
“Pensamos en el mes de septiembre para iniciar los ensayos clínicos, primero en Estados Unidos y en un país africano, que es donde están los casos. Habrá que determinar que las vacunas no entrañan efectos nocivos, que la respuesta inmunológica es excelente y determinar las dosis”, explicó.
Si los hallazgos son positivos, añadió, la vacuna puede llegar al mercado el próximo año.
El experto de la OMS indicó que GSK es sólo un candidato al desarrollo del fármaco y que hay al menos “otros cuatro o cinco, que aún no están en la fase de iniciar los ensayos clínicos”.
Okwo Bélé se refirió también al suero ZMapp, aplicado de forma experimental a los dos estadunidenses infectados procedentes de Liberia.
“Se ha usado de manera precipitada, pero parece dar resultados excelentes”, indicó el directivo de la OMS, quien lamentó que aún no haya suficiente cantidad de ese producto “para utilizarlo sobre el terreno, donde está la epidemia”.
Por ahora no existe un tratamiento específico para esta enfermedad, que se transmite por contacto directo con la
sangre y fluidos corporales de personas o animales infectados, causa hemorragias graves y puede tener una tasa de mortalidad de 90%.
Esta es la primera vez que se identifica y se confirma una epidemia de ébola en África occidental, pues hasta ahora siempre se habían producido en África Central, un brote que ha causado hasta ahora 961 muertes, según datos de la OMS. La organización declaró el viernes la enfermedad como una emergencia internacional.
El medicamento experimental contra el ébola ZMapp llegó ayer al hospital de Madrid donde está ingresado al misionero español infectado Miguel Pajares, informó el Ministerio de Sanidad.
“Después de que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios haya autorizado la importación excepcional de este fármaco”, el ZMapp llegó al hospital Carlos III donde se encuentra el sacerdote
de 75 años, anunció el Ministerio.
En tanto, Guinea, que anunció ayer por la mañana el cierre de sus fronteras terrestres con Liberia y Sierra Leona para intentar impedir la propagación del ébola, matizó su decisión para evitar una multiplicación de desplazamientos transfronterizos clandestinos.
“No se trata de un cierre de las fronteras entre Guinea, Liberia y Sierra Leona sino más bien de medidas estrictas para controlar los movimientos transfronterizos, sobre todo los de personas contactos”, es decir susceptibles de portar el virus, declaró el portavoz del gobierno, el ministro Albert Damantang Camara.
Muere monja congoleña en hospital de Liberia
Una monja congoleña que trabajaba en Liberia murió por el virus del ébola, informó ayer una organización humanitaria católica con sede en España.
En un comunicado en su página web, la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios dijo que la hermana Chantal Pascaline murió “de ébola en el Hospital San José de Monrovia, a pesar de los cuidados que estaba recibiendo por parte de un enfermero voluntario”.
Pascaline pertenecía a la misma orden del misionero español y la monja que fueron trasladados a Madrid en un avión días atrás. Ambos se encuentran en condición estable en un hospital de Madrid.
La orden dijo que se está preparando un equipo médico para que viaje a Liberia.
Por otra parte, los dos religiosos con ébola que permanecían aislados en el Hospital San José de Monrovia fueron trasladados ayer en ambulancia al hospital liberiano ELWA, gestionado por la ONG Médicos Sin Fronteras.
Se trata del ghanés Georges Combey y la monja guineana Paciencia Melgar, según informó en un comunicado la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, a la que pertenecen los religiosos, mediante su organización Juan Ciudad ONGD, que gestiona el Hospital San José de Monrovia.
Dicho centro hospitalario está cerrado desde el pasado 1 de agosto, tras la muerte de su director, Patrick Nshamdzea, a consecuencia del ébola.
Ante la alerta mundial que activó la OMS sobre el brote del ébola y las recomendaciones que hizo para el continente Americano, el gobierno de Bolivia puso sus fronteras y aeropuertos en estado de “vigilancia epidemiológica”.
El director nacional de Salud, Rubén Choque, explicó que el Ministerio de Salud envió información a todo país sobre las características del virus e instrucciones en caso de que se registren casos en territorio boliviano. “Vamos a reforzar los controles en las terminales de viaje, sobre todo en los aeropuertos”, aseguró.
Piden ayuda de voluntarios
Nuevos casos de ébola fueron detectados en la ciudad nigeriana de Lagos, la más poblada de África occidental, cuyas autoridades pidieron ayer la ayuda de voluntarios para combatir esta epidemia que ha dejado casi mil muertos en la región y es ya una emergencia de salud mundial, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Con 13 casos confirmados, probables o sospechosos, y de los cuales dos fueron mortales, Nigeria, el mayor país de África, es el cuarto afectado por la epidemia, que por ahora sólo se concentra en Lagos, capital económica con más de 20 millones de habitantes.
El estado de Lagos pidió ayer voluntarios: “Tenemos escasez de personal. No les voy a mentir. Por eso estamos pidiendo voluntarios”, declaró el comisionado a cargo de Salud, Jide Idris.
Debido a la aparición del virus en Lagos, Nigeria aprobó el desbloqueo de 11.5 millones de dólares para luchar contra la epidemia y decretó el viernes el estado de emergencia sanitaria.
Estados Unidos anunció por su parte el refuerzo de su ayuda a Nigeria. Su agencia de desarrollo (USAID) prometió además 12 millones de dólares para la lucha contra la epidemia en los cuatro países afectados: Guinea, Liberia, Sierra Leona y Nigeria.
Por ahora, no existe ningún tratamiento específico para tratar o prevenir esta fiebre hemorrágica provocada por un virus que se transmite por contacto directo con la sangre, líquidos biológicos o tejidos de personas o animales infectados.
Un golpe a la economía
El brote de ébola está interrumpiendo negocios e infligiendo daño económico en los tres países africanos en el centro de la crisis: Guinea, Sierra Leona y Liberia. Hasta el momento, los analistas dicen que la crisis no amenaza a más economías africanas o la global.
“Debemos asegurarnos de que el virus se controla y contiene lo más rápido posible”, dijo Olusegun Aganga, ministro de Comercio de Nigeria. “Una vez hecho esto, no creo que esto vaya a tener un impacto duradero en la economía”.
El Banco Mundial estima que el brote reducirá el crecimiento económico en Guinea, donde la crisis surgió en marzo, desde 4,5% a 3,5% este año.
Ama Egyaba Baidu-Forson, economista de IHS Global Insight especializada en el África subsahariana, redujo sus previsiones de crecimiento para este año en Liberia y Sierra Leona. Advirtió que los precios subirán porque los alimentos y otros productos básicos escasearán y prevé que los frágiles gobiernos de la región acumularán enormes déficits presupuestarios en la lucha contra el ébola.
Mientras tanto, las multinacionales que hacen negocios en la región están luchando para responder a la crisis.