Ocho presuntos delincuentes murieron en dos enfrentamientos armados con Fuerzas Federales ocurridos en las últimas horas en el estado de Guerrero, informaron fuentes estatales.
El primer suceso ocurrió en la ciudad de Zumpango del Río, próxima a Chilpancingo, la capital de estado, donde un grupo de la Policía Federal se enfrentó con delincuentes que se encontraban en un bar de la población.
Una fuente de la Procuraduría del estado dijo a Efe que en lugar murieron 4 presuntos sicarios de los cuales aún se desconoce su identidad.
El enfrentamiento sucedió a las 10.00 hora local, cuando los agentes se encontraban cerca del centro de la ciudad donde se lleva a cabo la tradicional feria del poblado, a la que asisten cientos de personas.
El poblado prácticamente se encuentra sitiado por las fuerzas federales para preservar la seguridad de la población.
Por otra parte en la comunidad Pantla, del municipio de Zihuatanejo, se registró un segundo enfrentamiento entre presuntos delincuentes y elementos del Ejército mexicano en el que murieron cuatro civiles, indicó la Procuraduría General de Justicia de Guerrero.
Detallaron que en esta ocasión el suceso se desencadenó a las 11.00 hora local cuando un grupo criminal atacó a un convoy militar que pasaba por esa comunidad.
Los soldados repelieron la agresión lo que dejó muertos a cuatro presuntos delincuentes.
Hasta el momento se desconoce la identidad de los fallecidos en una región del sur de México donde hay operativos militares para preservar la seguridad.
En los últimos días en Guerrero se ha intensificado la seguridad por parte de la Policía Federal, la estatal y el Ejercito Mexicano, en acciones para preservar la seguridad, especialmente en los límites con el estado de Michoacán, donde hay una militarización parcial del estado por la presencia de grupos de autodefensa y de la organización criminal de Los Caballeros Templarios.
En la zona centro del estado de Guerrero la autodefensas controlan ya poblados cercanos a Chilpancingo, la capital del estado, y han realizado operativos contra un grupo delictivo conocido como "Los Rojos", una escisión del cártel de los hermanos Beltrán Leyva.