La realidad de los migrantes se ha retratado en varias ocasiones en el cine. Este año se dio el estreno comercial de “La Jaula de Oro” en los cines de México, la cinta más premiada en la historia del país en diversos festivales, que cuenta la cruda odisea de unos niños por llegar a Estados Unidos.
Esa realidad difícil de lucha y dificultades por la que las personas tienen que pasar en busca de una vida mejor, era lo que interesaba al director Jorge Ramírez-Suárez, sin embargo, él tenía otra idea en la cabeza: contar una historia más positiva para que la gente saliera de las salas de cine con un buen humor. El resultado fue “Guten Tag, Ramón”, para la cual no mandó a un mexicano a norteamérica, sino que decidió llevarlo hasta Alemania, en donde el frío y el idioma serán un vehículo para que nazca una nueva amistad.
“No es una historia de migración, sino de dos mundos que se encuentran”, comentó Ramírez-Suárez en entrevista con El Universal, sobre esta co-producción de México y Alemania, que es su cuarto largometraje. El cineasta mexicano realizó anteriormente las cintas “Morena” (1995), “Conejo en la Luna” (2004) y “Amar” (2009), y con “Guten Tag, Ramón” decidió saldar varias deudas. Con esta nueva película, cuyo título se traduce del alemán como “buen día, Ramón”, el director busca concretar sus planes de hacer una cinta en conjunto con Alemania, país donde ha vivido, además de entregarle a su público una historia más positiva, llena de optimismo, que los divierta y se aleje de las concepciones más crudas de la realidad de los migrantes.
CONSIGUIENDO ACTORES
“Me preocupa que en México muchos jóvenes deben migrar porque no tienen oportunidad de nada. Lo terrible que pasa con los migrantes ya todo mundo lo conoce, lo vemos en los noticieros, y yo deseaba narrar una historia de amistad porque Ramón (protagonista) conoció a una señora sensacional. Como él es muy inocente, genuino y auténtico, la señora decide ayudarlo. Para mí era importante que Ramón fuera un chavito”, declaró el director en entrevista con Proceso. Para tal objetivo, el cineasta optó por el joven actor Kristyan Ferrer, quien con tan solo 19 años, ya ha participado en cintas como “El Infierno” (2010), “Días de Gracia” (2011) y “Besos de Azúcar” (2013).
“Es un actor que ha trabajado ya mucho tiempo, empezó muy jovencito, con nueve años. Cuando vi ‘Días de Gracia’ dije: ‘aquí está mi actor’ y efectivamente le dije: ‘estoy desarrollando este proyecto’. Desde muy temprano se lo di y ya empecé a reescribir muchas cosas a partir de que sabía que él era el personaje principal”, señaló el director a NotiCine.com
Pero una vez elegido el actor principal, tendría que trabajar con la parte alemana. “Sí necesité más ayuda, porque no había dirigido anteriormente a un actor alemán”, dijo el cineasta NotiCine.com. “Me puse en contacto con una agencia especializada alemana y me hablaron de Ingeborg Schöner, que es la viejita principal de la película. Lleva 100 películas; trabajó con Vittorio de Sica, con muchos directores italianos. Ella habla italiano. Pero tenía 80 años la señora. Tenía ya un rato que no había trabajado. En los últimos cuatro años había hecho una serie de televisión muy conocida en Alemania pero era lo último que había hecho. Y le encantó que la llamara. Y además, sobre todo para un personaje principal, porque la verdad, ya a esas edades los llaman para personajes más pequeños. Y la verdad fue un gran, gran acierto. Es una súper actriz. Y me encantó su perfeccionismo”.
UNA HISTORIA POSITIVA
“Guten Tag, Ramón”, filmada en Durango y en Wiesbaden y Fráncfort, Alemania, cuenta sobre un joven (Ferrer) que ha sido deportado de Estados Unidos en cinco ocasiones, en busca de una mejor vida, para ayudar a su madre y abuela que están enfermas. Desilusionado, Ramón parece recuperar las esperanzas cuando un amigo le platica que en Alemania tiene una tía y que allá no hay migra, ni gente que lo vaya a deportar. Así que con mucho esfuerzo, Ramón decide viajar a Alemania, pero cuando no encuentra al familiar de su amigo, se queda sin dinero, entre el frío y viviendo en un país donde no entiende nada del idioma. Su vida da un giro cuando conoce a Ruth (Schöner), una mujer pensionada que decide darle un lugar donde quedarse y lo ayuda a encontrar trabajo. Sin entender una palabra de lo que dicen mutuamente, ambos conseguirán formar una amistad.
“Es una historia realista, divertida y al mismo tiempo dramática, como me gusta hacerlas en cine, con un poco de todo y como en la vida misma”, señaló el director a Proceso. “Conocí a unos chavitos como Ramón que llevaban un buen rato viviendo en Alemania, limpiando casas, sin hablar alemán, sin ningún sistema de seguridad ni nada. Y que había un señor de la tercera edad que les proporcionaba un lugar donde dormir y así trabajaban, enviaban dinero a su casa en México, y narraban que habían intentado pasar a Estados Unidos y que les había ido horrible. Alemania hoy en día se preocupa por los migrantes”, añadió el cineasta, asegurando que su película está basada en situaciones de la vida real. Al investigar sobre el asunto, Ramírez-Suárez descubrió que había muchos latinos que viajaban a Europa donde les va muy bien debido a la solidaridad y amistad que encuentran en el otro continente, aspecto que quiso reflejar con su película.
“Es una película mucho más humana también. Y sobre todo es una película en la que lo que estamos tratando de plantear es que la pobreza no necesariamente nos convierte en criminales. Yo creo que hay muchísima gente muy humilde en México, que tiene un gran corazón. México es un pueblo muy amistoso y a pesar de los problemas tiene mucha alegría, y yo quise reflejar eso en la película. También he querido llegar a un gran público. Hay 20 millones de mexicanos viviendo fuera de México y 110 millones en México. Yo creo que hay un gran potencial para que otros países vean a otro personaje, a un personaje mexicano que no es un migrante criminal, o no es un narcotraficante, son una persona muy linda, y muy humana y que puede dar mucho amor”, explicó el director a NotiCine.com. Así, para el director la unión de dos mundos no tiene que ser dura, ni difícil, pues en su obra, a pesar de los problemas, quiere sobre todo hacer sentir bien a su público.
El dato
La cinta fue dirigida por Jorge Ramírez-Suárez.
Fue co-producida por México y Alemania.
Se filmó en Durango y en Wiesbaden y Fráncfort, Alemania.
Cuenta con las actuaciones de Kristyan Ferrer e Ingeborg Schöner.
El director ha realizado anteriormente las cintas “Morena” (1995), “Conejo en la Luna” (2004) y “Amar” (2009).