A 12 días de concluir su sexenio, el presidente Andrés Manuel López Obrador envió una propuesta de reforma a la Cámara de Diputados para dar certeza jurídica para la portación de armas de fuego a jornaleros, comuneros y ejidatarios para la protección de sus bienes.
En el caso de los ejidatarios, comuneros y jornaleros interesados en poseer un arma, la iniciativa dice que tendrán que comprobar su calidad a través de documentos emitidos por autoridades agrarias o de las localidades donde residen.
En la exposición de motivos, la iniciativa señala que “como una acción de inclusión, se establece la certeza jurídica para la portación de armas de fuego permitidas, para las personas ejidatarias, comuneras, sucesoras, pequeños propietarios, avecindados y jornaleras del campo, así como pueblos y comunidades indígenas y afromexicanos, con el fin de facultarlos y garantizar la portación fuera de las zonas urbanas para la protección de sus bienes jurídicos tutelados y evitar que sean consignados por las autoridades por la portación de armas de fuego”.
Entre las armas que se podrían poseer están las pistolas semiautomáticas de calibre no superior al .380 y su equivalente 9×17 mm o 9mm Short o 9mm Kurz.
De igual forma los rifles .22 y escopetas de cualquier calibre, exceptuando las de cañón de longitud inferior a 635 mm y las de calibre superior a 18.5 mm.
Portación y uso de armas de fuego en México
Además, en la exposición de motivos se explica que la iniciativa busca que integrantes de instituciones como Pemex, Banxico, la Casa de Moneda y el Servicio de Administración Tributaria puedan poseer armas, pues “en México es prioridad la seguridad de las áreas estratégicas y la seguridad pública”.
Reforma también busca un mayor control en las armas de fuego
Si bien la reforma propuesta por el presidente López Obrador permite la posesión de armas de fuego a un sector de la población, al mismo tiempo endurece las penas y fortalece el control de armamento para intentar reducir los homicidios y el tráfico ilegal.
Según la iniciativa presidencial, el 70% de las muertes no naturales en México son provocadas con armas de fuego. Además, anualmente 213 mil armas de fuego entran al país de manera ilegal, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Para intentar atender este problema, entre otros temas la iniciativa propone que la Presidencia de la República, junto con la Secretaría de la Defensa Nacional, tengan un control total sobre la expedición de permisos, licencias y manifestaciones de armas de fuego, además del registro y control de las actividades de fabricación y comercialización.
La iniciativa también propone una mayor regulación a los calibres .357, .22’’ Magnum, Hornet y TCm, debido a que por sus características balísticas poseen mayor capacidad de alcance y velocidad que desarrollan al momento del disparo.
Por seguridad nacional, también se incluye la prohibición del envío de armas, municiones, explosivos, sustancias químicas reguladas y pirotecnia por el Servicio Postal Mexicano o de empresas de paquetería, así como plataformas de internet.
La iniciativa enviada por el presidente Andrés Manuel López Obrador fue turnada a la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados, con el objetivo de que sea sometida a una primera discusión.