Cancún, Quintana Roo.– El Parque de las Palapas se tiñó de color y esperanza durante la jornada “Muévete por la Vida”, donde la presidenta municipal Ana Paty Peralta se sumó con entusiasmo a esta emotiva iniciativa del Instituto Municipal de la Mujer (IMM), en el marco del Octubre Rosa, mes dedicado a la prevención y detección temprana del cáncer de mama.
Más de 300 mujeres vestidas de rosa llenaron el icónico parque de energía y alegría en una clase masiva de zumba que combinó ritmo, salud y solidaridad. La alcaldesa compartió con las asistentes momentos de baile, risas y reflexión, destacando la importancia de cuidar el cuerpo y el alma.
“Esta actividad no es solo para activarnos físicamente y pasar juntas un rato divertido, sino también para recordarnos que cuidarnos es querernos, y que cada paso hacia la salud es un paso hacia una vida más plena”, expresó Ana Paty Peralta, entre aplausos y sonrisas.
Con un mensaje cargado de empatía, la presidenta municipal hizo un llamado a las mujeres a realizarse chequeos constantes, mastografías y autoexploraciones, recordando que la detección oportuna salva vidas. Subrayó que cuando el cáncer de mama se detecta a tiempo, las posibilidades de recuperación pueden superar el 90 por ciento.
Durante la jornada, se entregaron 300 pases para mastografías gratuitas en la Unidad de Especialidades Médicas (UNEME), reafirmando el compromiso del Ayuntamiento de Cancún de que la salud es un derecho, no un privilegio. Además, una Unidad Médica Móvil se instaló en el lugar para acercar servicios preventivos a las mujeres que más lo necesitan.
La directora del IMM, Miroslava Reguera Martínez, y el director general de salud, Héctor González Rodríguez, impartieron charlas sobre prevención, autoexploración y detección temprana, brindando herramientas clave para identificar señales de alerta y fomentar la cultura del autocuidado.
El evento cerró con un ambiente lleno de esperanza, luces, música y lazos rosas ondeando al viento, símbolo de lucha, amor y fortaleza. “Muévete por la Vida” dejó una huella profunda en cada participante: la de una comunidad de mujeres valientes, solidarias y decididas a vivir plenamente, recordando que moverse también es una forma de sanar y de seguir adelante.



