En medio de las investigaciones por una supuesta red de huachicol fiscal, los hermanos Andrés Manuel “Andy” y Gonzalo “Bobby” López Beltrán, hijos del expresidente Andrés Manuel López Obrador, negaron haber promovido la solicitud de amparo que un juzgado federal concedió para evitar cualquier detención.
Amparo bajo la lupa
La medida cautelar —concedida de manera preventiva— protege a los beneficiarios de una posible orden de aprehensión y de actos de incomunicación o detención arbitraria. Sin embargo, los hijos del exmandatario aseguraron no haber presentado ni firmado ningún recurso legal, marcando una clara contradicción entre el registro judicial y su postura pública.
Acusaciones sin sustento firme
A pesar de las versiones que los relacionan con una red de contrabando de combustible, no existe orden de aprehensión formal ni imputación judicial directa en su contra. El caso, ampliamente difundido en medios y redes sociales, se mantiene en una fase de investigación preliminar.
Daño a la imagen y presión política
La inclusión de sus nombres en la lista de personas protegidas por el amparo ha generado un fuerte impacto mediático y político, alimentando especulaciones sobre su presunta implicación. Los López Beltrán recalcaron que esta situación ha afectado su reputación y exigieron que las autoridades aclaren el origen de la solicitud que los involucra.
Panorama abierto
El episodio deja al descubierto inconsistencias en el manejo de la información judicial y plantea dudas sobre quién o quiénes solicitaron realmente el amparo. Mientras tanto, las investigaciones por el presunto huachicol fiscal continúan, pero sin pruebas concluyentes ni acusaciones formales contra los hijos del ex presidente.



