AGENCIA SIM
Cancún.- Uno de los presuntos orquestados de los juicios laborales falsos en la zona norte de Quintana Roo, el exsubsecretario del Trabajo y Previsión Social del gobierno Borgista, Enrique de la Cruz Pinera se pasea tranquilamente en los mejores restaurantes de Cancún.
La tarde de este martes se le vio en el restaurant Rolandis de la avenida Coba casi esquina con la avenida Tulum, en la Supermanzana 5 de esta ciudad, en compañía de la familia, aunque presuntamente se informó que tiene orden de aprehensión en su contra por desempeño irregular de funciones públicas.
De la Cruz Pineda contribuyó a que empresarios fueran despojados de bienes inmuebles, pero también de su dinero a través del congelamiento de cuentas bancarias. Con la ayuda de este funcionario, familiares y amigos del exgobernador Roberto Borge se quedaron con terrenos y hoteles en Tulum, embargaron condominios en Cancún, y se ha apoderado de departamentos de lujo para después venderlos a la mitad de su valor a funcionarios públicos.
Pero no actuó solo, sino en la red de corrupción coludidos con funcionarios cercanos a Borge. Uno de ellos es Carlos Lima, ex director del Registro Público y del Comercio (RPyC), a quien ahora funge como magistrado a propuesta directa del entonces gobernador.
Otros funcionarios implicados con Enrique de la Cruz son el ex secretario del Trabajo, Patricio de la Peña; y el presidente de la Junta Especial Número Dos de Conciliación y Arbitraje, Alexis Zavala Ávila.
Hoy, De la Cruz Pineda se placea en las narices de las autoridades y de los ofendidos, sin que hasta el momento se haga justicia, pese a los esfuerzos de la secretaria del trabajo, Catalina Portillo Navarro.
