En lo que va del año van al menos 5 secuestros y otros tantos en la cifra negra que no se denuncia el último fue el de un ejidatario de apellido Mena por el cual pagaron cinco millones de pesos sin que exista denuncia al respecto
Además de las extorsiones a comercios, el crimen organizado está comenzando a sembrar terror a través del secuestro en Cancún y en las periferias de la zona urbana tanto de la zona continental de Isla Mujeres como en la delegación de Alfredo V. Bonfil, como una forma rápida de recapitalizar a su organización delictiva para seguir peleando la plaza.
De acuerdos a fuentes policiales, se ha tenido información respecto a hechos consumados de secuestro, en donde las víctimas no han querido presentar las denuncias correspondientes porque temor a las advertencias que les hicieron.
Entre la información que los cuerpos de seguridad manejan, existe el caso de al menos cinco empresarios de Cancún que han sido víctimas de secuestro y que por su rescate, les han exigido a sus familiares por lo menos un millón de pesos, como una forma fácil para poder liberarlos.
Esto ha llamado la atención porque podría tratarse de delincuentes locales que inició bajo la delincuencia común que han emergido de las pandillas de la ciudad y que han encabezado incluso asaltos violentos a diversos negocios.
También, se habla de que ejidatarios de Isla Mujeres e incluso Alfredo V. Bonfil, donde por cierto existe actualmente un proceso de campaña para la elección de la nueva directiva, de igual manera se han dado casos de secuestros, cuyos hechos han tenido muy baja duración debido al poco recurso que exigen a sus familiares, ya que esta gente vinculada al crimen organizado, lo que requiere es tener dinero a la mano y urgente para mantener la operación del grupo delictivo y con ello, seguir peleando la plaza.
Ante todo esto, llama la atención que estos hechos se han registrado en medio de operativos como la “Lluvia de Estrellas” y el “Riviera Maya 2017”, emprendido por la Policía Federal y el Ejército, respectivamente.
Y ante la presión y temor que ha sembrado la delincuencia en Cancún, de forma inusual en los últimos días, luego del asalto a la sucursal bancaria de Banorte, se ha observado mayor presencia de los cuerpos de seguridad, tanto Policía Municipal como Estatal, e incluso Policía Federal, recorriendo algunas zonas de la ciudad.
Sin embargo, esto no ha cambiado la percepción de inseguridad debido a que el sector comercial ha sido severamente “golpeado” en las últimas semanas con las extorsiones, lo que ha obligado al cierre de varios negocios por este grave flagelo.
