Cancún, Q. Roo, 28 de septiembre de 2025. El capitán Armando Castillo Huerta, alto mando de la Guardia Nacional destacado en el Aeropuerto Internacional de Cancún, enfrenta señalamientos crecientes por su presunta participación en una red de protección a actividades ilícitas, de acuerdo con versiones difundidas en redes sociales y fuentes cercanas a la corporación.
Las acusaciones apuntan a que Castillo Huerta habría facilitado operaciones de narcotráfico, extorsión y otros delitos, a cambio de sobornos o beneficios económicos. Según la información que circula, el capitán presuntamente filtraba datos estratégicos a grupos delictivos y ordenaba a sus subordinados omitir acciones de vigilancia cuando estas organizaciones operaban en áreas clave del aeropuerto.
La polémica se intensificó tras un hecho violento ocurrido hace unas semanas en el propio Aeropuerto de Cancún, cuando, por inconformidades en el reparto de dádivas, un elemento de la Guardia Nacional baleó a otro, hecho que reforzó las sospechas de pugnas internas ligadas a presuntos beneficios ilegales.
Hasta el momento no hay una investigación oficial anunciada, pero organizaciones civiles y ciudadanos exigen a la Fiscalía General del Estado y a las autoridades federales una revisión profunda de las operaciones en la terminal aérea. Especialistas advierten que, de comprobarse estas acusaciones, Castillo Huerta podría enfrentar cargos por abuso de autoridad, encubrimiento y cohecho, además de poner en riesgo la seguridad de uno de los aeropuertos más importantes de México.
La presión pública aumenta para que se realicen auditorías y se recaben pruebas digitales, incluyendo comunicaciones internas y registros financieros, que permitan esclarecer el alcance de la presunta red de corrupción y determinar las responsabilidades dentro de la Guardia Nacional en Cancún.