En un operativo coordinado por la Fiscalía General del Estado (FGE), fue desmantelado un grupo criminal ligado al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), que operaba en Playa del Carmen y que imponía a sus nuevos integrantes prácticas brutales que incluían el consumo forzado de carne humana como parte de su entrenamiento.
Reclutamiento engañoso y adiestramiento extremo
De acuerdo con las investigaciones, los criminales atraían a jóvenes a través de ofertas laborales falsas en redes sociales, principalmente bajo la fachada de empleos como guardias de seguridad. Una vez captados, eran trasladados a un centro clandestino de entrenamiento donde se les sometía a prácticas violentas y de control absoluto.
Durante los interrogatorios, el líder de la célula confesó que en dicho lugar se reunieron hasta 120 reclutas. Cuatro de ellos fueron ejecutados y posteriormente cocinados, para que el resto fuera obligado a consumir su carne como un ritual de sometimiento.
Detenciones y proceso judicial
En total fueron capturados ocho integrantes del CJNG, algunos en Playa del Carmen y otros en carretera cuando intentaban moverse desde Campeche. Todos ya fueron vinculados a proceso y permanecen bajo custodia, mientras continúan las indagatorias para identificar a otros miembros de la red criminal.
Expansión criminal en Quintana Roo
Las primeras pesquisas revelan que esta célula buscaba afianzar el control del CJNG en la zona norte de Quintana Roo, particularmente en Playa del Carmen, mediante el terror y la disciplina criminal. La FGE mantiene abiertas varias carpetas de investigación para desarticular la estructura completa y frenar su expansión en la entidad.



