Al polémico expresidente del Partido Verde de México Arturo Escobar lo busca la justicia. La Fiscalía Especializada para la Atención de Delito Electorales (Fepade), que depende de la Fiscalía general, ha pedido a un juez el arresto del subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación (Interior). Escobar habría incurrido en un delito electoral al contratar una empresa para entregar tarjetas de descuento a los votantes durante las elecciones del pasado mes de junio.
Escobar adquirió 10.000 tarjetas y su partido las envió a varios domicilios para recompensar la fidelidad de los votantes al Partido Verde. Sin embargo, los carnets, que daban descuentos en 8.000 comercios, también llegaron a personas que no estaban afiliadas a esa agrupación política, por lo que el Partido Acción Nacional (PAN, de derecha) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD, de izquierda) denunciaron al funcionario ante las autoridades electorales.
El juez deberá decidir en los próximos 10 días si arresta a Escobar o no. La Ley General en Materia de Delito Electorales señala que quienes entreguen dinero o un pago en especie para respaldar a un partido o candidato, durante el proceso electoral, pueden ser castigados con una pena de entre 5 y 15 años de prisión o una multa económica. El funcionario ha pedido una excedencia laboral mientras la investigación continúa.
Esta no es la primera vez que Escobar es señalado por su dudosa estrategia para conseguir el voto y financiar a su partido. En 2009, Escobar fue detenido en Chiapas con una maleta Louis Vuitton que contenía 65.000 dólares en efectivo. Entonces, reconoció que el bolso era suyo pero que desconocía el origen del dinero. El Partido Verde Ecologista de México (PVEM) es una formación muy polémica en México por sus posturas políticas en favor de la pena de muerte y el fracking (la fracturación hidráulica para obtener hidrocarburos).
En las últimas elecciones, el Partido Verde hizo una alianza con el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) para aumentar sus escaños en el Congreso. Tras los comicios, Escobar fue nombrado en septiembre subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación, en medio de críticas sobre su falta de experiencia laboral en el tema de prevención del delito y ante señalamientos de que su nuevo cargo era un premio por parte de la Administración del presidente, Enrique Peña Nieto, por su desempeño durante las elecciones.